4tos. de Final

Después de eliminar a Gremio, a San Lorenzo le tocó enfrentar al tercer equipo brasileño en fila. Esta vez el rival fue Cruzeiro, de Belo Horizonte, que también se clasificó segundo en su grupo y que en Octavos de Final dejó en el camino a Cerro Porteño, empatando a uno de local y ganando en Asunción dos a cero. Nuevamente, la cátedra ponía al Ciclón de punto. Aunque para los sanlorencistas eso nunca resultó un escollo insuperable. Al contrario, al equipo del Patón Bauza le caía bien no ir de banca.

Gentiletti, ya mandó la pelota a la red.
Durante los noventa minutos jugados en el Nuevo Gasómetro, a San Lorenzo le costó marcar la diferencia en el marcador. Desde el comienzo, exhibió una leve superioridad sobre su rival pero sin encontrar la posibilidad de plasmarlo en el resultado.

Los minutos pasaban pero, a los 19 minutos del copmplemento, Santiago Gentiletti de cabeza, tras un preciso centro de Néstor Ortigoza, anotó el gol que valdría el triunfo.

Así, el conjunto de Bauza cumplió como local sacando una pequeña ventaja para irse a Belo Horizonte, adonde debía definir la serie y buscar meterse entre los mejores cuatro del certamen continental, el que aspiraba ganar por primera vez en su historia.

Nacho Piatti, anota el gol azulgrana.
Nunca fue fácil para los equipos argentinos jugar en la cancha del Mineirao, pero San Lorenzo acostumbrado a los límites de su rectángulo de juego, pudo superarlo y tras 26 años, volvió a clasificar a las semifinales de la Libertadores.

Nacho Piatti anotó el gol  para San Lorenzo y el Cóndor Torrico con sus voladas fue la figura del partido. El Ciclón jugó bien el primer tiempo y en el segundo con diez jugadores (sufrió la expulsión de Romagnoli) soportó los embates de Cruzeiro, que llegó al empate.

Igualmente, fue clasificación y alegría para San Lorenzo que despachó al tercer equipo brasileño en fila. Hacer realidad el sueño de ganar la Copa Libertadores estaba cada vez más cerca de hacerse realidad.
Los jugadores de cara a los hinchas que viajaron a Belo Horizonte a alentar al equipo.